Con una de las temporadas más estables y regulares de su carrera deportiva en el pádel (ganando dos títulos), MundiPadel se pone en contacto con Matías Díaz en exclusiva que nos cuenta cómo ha sido el año 2018. La separación de Ale Galán, su unión con Franco Stupaczuk, la situación del Mundial, sus metas para la próxima temporada o la revolución de los jóvenes son algunos de los temas que ha comentado con nosotros. ¡No te lo pierdas!
- Con la temporada 2018 ya terminada, ¿qué balance haces del año?
El balance a nivel global creo que es positivo. Acabamos como pareja 3 y arrancamos como pareja número 5. El primer semestre o los primeros ochos meses del año no bajamos de semifinales y ganamos dos torneos. Me queda un poquito el sabor amargo de la última etapa del año, pero el balance general es positivo.
- De todos los torneos jugados en 2018, ¿cuál ha sido especial para ti? ¿Por qué?
Me quedo con el primer torneo que ganamos junto a Ale que era la primera final que hacíamos. Para mí fue muy importante pero para él era su primer torneo profesional y siempre me va a tener en el recuerdo (cuando me retire) que fue conmigo con quien ganó el primer torneo. La verdad es que lo disfrutamos mucho.
- Si tuvieras que elegir entre las cosas más positivas que te han pasado este año, ¿cuál escogerías?
Entre las cosas positivas me quedo con haber conocido a Ale que seguramente le sufriré en contra en los años venideros; me ha gustado el equipo que formamos y el desarrollo que tuvimos de encajar dos tipos de juegos bastante diferentes, dos ciudades diferentes y todo ello me gustó mucho. Lo positivo es que lo trabajamos y lo desarrollamos, el equipo de trabajo también trabajó duro para llegar a eso y terminó en dos torneos ganados y un montón de semifinales.
- ¿Qué te parece lo sucedido en el Mundial de Pádel 2018 con unas condiciones insuficientes y la ausencia de ganadores en la categoría masculina?
El tema del Mundial es algo que hemos sufrido todos, más que nada los jugadores (españoles) junto a los jugadores argentinos; las dos selecciones tomamos la decisión difícil de no jugar una final. Eso es porque creíamos y seguimos creyendo que las condiciones eran totalmente insuficientes para poder desarrollar un nivel del pádel como está actualmente.
Lo que es triste es que tengamos que hacer esto para reivindicar cosas sin jugar una final de un Mundial que nos duele a todos. Espero que tomen nota los dirigentes para que en un futuro las cosas se puedan hacer mejor y que vayamos todos de la mano y no tener que hacer estas cosas porque las condiciones del torneo no son las adocenas.
- ¿Cómo ha sido la separación de Ale Galán después de un año llenó de alegrías y tus primeros títulos como profesional del pádel?
Todas las separaciones y rupturas muchas veces son duras. Con Ale en un momento del año había elegido un camino diferente que era jugar otro circuito. Yo actué en consecuencia y tuve que buscar otro compañero. No fue tan traumático porque él había decidido irse a otro circuito, el trauma fue cuando lamentablemente el otro circuito se cae y quedan muchos jugadores tirados y colgados. La ruptura no fue del todo traumática en sí, fueron elecciones que se hacen, se apuestan y quedan ahí.
Los primeros títulos, sobre todo el primero, fue una alegría y encima luego llegó acompañado del segundo título en Lugo. Ahí se veía la madurez que iba cogiendo la pareja, fue un placer estar todo un año acompañando a Ale porque muchas veces lo acompañaba y yo jugaba e intentaba no molestar jajaja Tener dos títulos fue una alegría.
- ¿Cómo se ha fraguado la unión con uno de los mejores jugadores del panorama como es Franco Stupaczuk?
Como Ale había decidido jugar en el IPT, en mi caso tenía que buscar pareja que se quedara en el circuito World Padel Tour. Miré a los reveses con los que podía jugar, Franco es una gran referencia a nivel de pádel y justo coincidió que me llamó él y coincidimos en la idea que teníamos. Y nos fraguamos.
- El pádel sigue creciendo fuera y dentro de nuestras fronteras, ¿se sigue notando ese crecimiento entre los aficionados de otros países?
Yo creo que cada año el pádel va dando un pasito más, va paso a paso, un pasito lento pero seguro. Cada vez hay más pruebas fuera de España, siempre pongo el ejemplo de Suecia que fuimos a jugar en 2018. Hemos jugado con 1.500 personas en las semifinales y 1.500 en la final pagando entrada; eso hace 4 o 5 años era impensable.
World Padel Tour está ayudando mucho al desarrollo del deporte con las federaciones y el pádel mismo se va expandiendo y va abriendo sus fronteras. Irá lentamente porque es un deporte nuevo pero yo creo que ya no lo para nadie.
- En 2018 Fernando Belasteguín ha dejado de ser el número 1 del pádel tras 16 años consecutivos, ¿estamos ante una revolución en el mundo del pádel?
Yo creo que sí que hay una revolución, un recambio. Estamos en un período de transición y expansión del pádel dónde se están combinando parejas muy jóvenes y de mucho talento y de mucho futuro con personas ya experimentadas. Como el que habla, como Fernando y otros jugadores que ya estamos en la etapa final de nuestra carrera (que todavía nos quedan años) y los chicos están aún en la etapa de formación.
Así que yo creo que si hay una revolución del pádel, los que tenemos más años nos retiraremos y ellos tomarán el relevo. Y eso funcionará así, se harán viejos y vendrán otros a tomar el relevo.
- Los jóvenes siguen pisando fuerte con su presencia en la mayoría de cuadros finales de cada torneo, ¿están desbancando a los jugadores veteranos?
Los jóvenes vienen pisando fuerte, el pádel está en un proceso de cambio. Cada vez hay más profesionales que entrenan más y mejor, entonces los veteranos que estamos arriba en el ranking por ley natural de la vida, iremos desapareciendo. Tomarán relevo todos estos jóvenes lo que augura en los próximos 5-10 años un nivel de pádel excepcional porque vienen mucho mejor preparados y más profesionalizados que lo era antaño.
- Acabada la temporada, ¿se han cumplido los objetivos que te marcaste al comienzo de la misma?
Había muchos objetivos que no nos habíamos planteado a principios de año y la verdad es que vinieron muy pronto y nos han sorprendido como fue ganar dos títulos. Los resultados fueron muy positivos desde principio de año y veníamos cumpliendo los objetivos reales que nos habíamos puesto.
- ¿Qué metas te gustará conseguir de cara a la temporada 2019?
Las metas con respecto al 2019 a nivel personal es armar un buen equipo de trabajo y una gran pareja con Franco, seguir siendo competitivo a nivel de pádel y nivel profesional. Y a nivel de resultados obviamente me encantaría ganar todos los torneos y estar pareja 1, eso siempre está en la mente. Pero sobre todo ser competitivo al 100%.
- ¿Algo que quieras añadir?
Siempre hay que agradecer a la familia que es el sustento que nos apoya día a día, nos ve sufrir y nos ve ganar. Siempre se lo quiero agradecer a ellos, tanto a mi señora como a mis hijos. Luego los que están un poquito más lejanos que son mis padres. Gracias a ellos podemos desarrollar el deporte que hacemos.
Y por el último a todos los patrocinadores que nos apoyan de alguna u otra manera ya que sin ese apoyo económico no podríamos ser quiénes somos; y los entrenadores que ya llevo mucho tiempo con ellos y son los que me aguantan día a día. El equipo de trabajo es fundamental, es un honor trabajar con ellos y estoy agradecido de hacerlo y que me sigan aguantando que es mejor aún (bromea).
El agradecimiento es para todas esas partes que hacen que uno al final pueda desarrollar esta actividad y ser un jugador profesional.
