Regla de oro para el entrenamiento de fuerza en el pádel

Regla de oro para el entrenamiento de fuerza en el pádel

Fabio Pablo Romojaro López regresa a MundiPadel para hablarnos de otro interesante aspecto que tiene relación con el pádel y seguro que interesa a nuestros seguidores: el entrenamiento de fuerza. Recordamos que esta temporada será entrenador de jugadores tan importantes como Agustín Gómez Silingo, Juan Manuel Restivo, Franco Stupaczuk, Martin Di Nenno, Silvana Campus, Delfi Brea, Pablo Lijó y Federico Quiles.

Regla de oro para el entrenamiento de fuerza en el pádel

Durante los últimos años, el diseño de programas de entrenamiento de la fuerza y acondicionamiento específicos para el pádel, ha recibido un interés relevante. Como regla de oro para ir empezando un entrenamiento de fuerza, sería básico y primordial trabajar los músculos estabilizadores.

Los motores primarios o agonistas son los músculos responsables de la acción principal del movimiento y trabajan con mayor efectividad con la ayuda de potentes músculos estabilizadores o fijadores.

Los músculos estabilizadores se contraen, primero isométricamente, para inmovilizar una extremidad y que otra parte del cuerpo pueda actuar. Son los músculos que mantienen la articulación alineada, evitando dislocación o desgarros en el tejido. Para ser más claros, en el lanzamiento de una pelota, los abdominales serían los estabilizadores de todo el tronco y al trabajar bíceps en una flexión de codos, los hombros actuarían como estabilizadores.

Un músculo estabilizador débil inhibe la capacidad de contracción de los motores primarios. Cuando se someten a tensiones crónicas, los músculos estabilizadores sufren espasmos, con lo cual refrenan los motores primarios y reducen la eficacia deportiva. También pueden controlar el estado de las interacciones de los huesos largos en las articulaciones, y perciben las lesiones potenciales como resultado de una técnica incorrecta, una fuerza inadecuada o los espasmos producidos por ejercer un  mal control de las tensiones.

Hay que reservar tiempo durante los periodos de transición y preparatorio, sobre todo en la fase de adaptación anatómica para el entrenamiento de los estabilizadores. Los músculos centrales, los rotadores y estabilizadores deben desarrollarse con una progresión a largo plazo.

Debemos tener en cuenta que la musculatura estabilizadora se encuentra en muchas localizaciones corporales, entre las que destacamos 3 zonas de vital importancia: cintura escapular, el famoso core y la cadera. Estos son los puntos críticos que provocan errores de higiene postural durante la ejecución de movimientos tan comunes como la plancha frontal, el squat o la simple carrera.

Para activar estos músculos, una buena manera sería con ejercicios donde se comprometa la musculatura estabilizadora, teniendo la capacidad de concentrar la contracción muscular en aquellas zonas donde se encuentran los estabilizadores iremos por buen camino.

Si entrenamos con peso libre mejor que con máquinas y alternamos ejercicios unilaterales con los bilaterales, sería un buen comienzo para entrenar eficazmente, pudiendo utilizar materiales tipo: discos de equilibrio, bosu, trx y fitball entre otros. Dedicando sesiones específicas para trabajar este concepto, invertiremos en un mayor rendimiento y calidad de vida.

Palas de pádel 2023